EL CIRQUE DU SOLEIL, EN SU MUNDO
Autor y director: D. Champagne. Música: V. Corradi. Escenografía: S. Roy. Diseño de vestuario: E. Ishioka. Director de creación: A. Watson. Coreografías: M. Montanaro, B.Shannon. Maquillaje: Nathalie Gagné. Recinto Ferial de la Casa de Campo. Madrid. ★★
Es cierto que el Cirque du Soleil hace viajar a otros mundos. Lo malo es que acaban siendo siempre los mismos. Conviene acercarse a los espectáculos de esta multinacional circense más con mirada de niño que con espíritu de crítico: de lo contrario, todo está sujeto al escepticismo: desde el «merchandising», que abruma al espectador, hasta la repetición de números barnizados con un vestuario y maquillaje diferentes o el anonimato de sus artistas (mientras que los creadores sí aparecen en los programas de mano: está claro quién importa a la compañía). En fin, que mejor dejarse llevar durante un par de horas por la magia de los viajes fantásticos que propone el Cirque y gozar con la sorpresa y el más difícil todavía.
Hay que reconocer que algunos números son espectaculares, como los «juegos de Ícaro», en los que una «troupe» de atletas da vueltas de maneras imposibles y se sostienen en el aire gracias a sus piernas; o los malabarismos, culminados con un espectacular número de sombreros lanzados como bumerangs; o ese trío de críos orientales que no levantan más de medio metro del suelo y hacen cosas increíbles con unas cuerdas llamadas meteoros... Un artista discapacitado capaz de insospechadas coreografías con un par de muletas, un número de columpio ruso que parece cortar el suelo mientras se bambolea como un péndulo, y las fantasías aéreas de un triple trapecio con un cuarteto de acróbatas están también entre los momentos que quitan el aliento.
Sin embargo, el Cirque sigue siendo, esencialmente, el mismo que el de «Dralion», «Saltimbanco» o «Alegría», con sus oportunas variaciones temáticas... O quien firma se empieza a hacer viejo o estos chicos se repiten ya más que el «TBO».
Que tal. Agradezco la oportunidad que se me brinda para expresar mi comentario.
ResponderEliminarSr. Crítico: no dudo que sus opiniones sean objetivas y con un alto grado de conocimiento del tema. Sin embargo a veces, los espectadores nos preguntamos ¿que criterios utiliza un 'crítico' para decidir que las cosas sean perfectas o que se cumplan al grado de no tener errores?. Yo considero que la mejor crítica proviene de aquellas personas que han trabado o pisado el terreno que critican. Una persona que critica al cine es porque, ha trabajado no fuera, sino dentro del campo mismo del cine: dirigiendo, produciendo, actuando. O como dicen en mi pueblo: "si alguien critica la comida es porque sabe guisar y cocinar".
¿"más de lo mismo" se aplica a las producciones del Circo del Sol? No lo creo. Creo que no solo vasta con "ver" los eventos y decir que todos tienen el mismo color. Creo que a usted le hace falta OBSERVAR, involucrarse en cada molecúla que conforma todo ese universo, no solo del Circo del Sol, sino toda aquella producción que tiene el atreviemiento de arriesgar todas aquellas ideas, trabajos físicos y mentales para exponerlos ante el mundo y planetar nuevos horizontes en cuanto a trabajo del espectáculo se refiere. Yo lo invito a usted respetuosamente, a pisar de FRENTE y sin tapujos, un escenario (de la misma magnitud del Cirque Du Soleil o de cualquier otro espectáculo de tal nivel internacional) frente a un público expectante, que espera en usted ver SU TRABAJO y demostrar lo que se supone "debería de ser". Lo invito en verdad y que conozca en vivo, lo que (como se dice coloquialmente) "tener en frente al toro".